Las tortas de aceite tienen un origen antiguo, pues ya desde la Edad Media están presentes en la mayoría de pueblos mediterráneos donde es habitual cultivar olivos. Tanto los judíos como los árabes extendieron su preparación y consumo por las regiones donde se establecieron.

Existen muchas variantes y todas tienen en común la harina de trigo u otro cereal y el aceite de oliva virgen extra. Una vez preparada la masa y estirada de forma manual suelen prepararse fritas o al horno.

En España las recetas más tradicionales tienen su origen en recetas árabes, judías o mozárabes y la mayoría tienen forma plana y redonda y suelen ser dulces y condimentadas con anís, canela, matalahuga, sésamo o alguna otra especia.

Están las orelletes, típicas de Cataluña, que encontraremos su receta en el apartado “recetas” de nuestra web y que se preparan en varias comarcas para alegrar distintas celebraciones: Semana Santa, fiestas mayores, etc. También encontrareis en nuestra web la receta de las tortas sevillanas.

En Baleares preparan una receta parecida y las llaman orellanes.

En Castilla y León hacen tortas de aceite castellanas, parecidas a un pan redondo y recubiertas de aceite. Las tortas de Aranda de Duero son parecidas a un pan de pita, esponjosas y con hoyuelos en su superficie para que el aceite penetre en su interior antes de hornearlas y las tortas dulces manchegas, similares a las anteriores pero tostadas y recubiertas de azúcar.

En Aragón encontramos las tortas de aceite de Teruel y de Alcubierre en Huesca y el pan de cañada.

En Galicia, donde además del aceite de oliva es habitual añadir manteca de cerdo al hacer la matanza en el inicio del Carnaval, se preparan las orejas de fraile u orellas de entroido, una masa frita y con azúcar molido por encima.

Andalucía es la reina en popularidad por sus célebres tortas de aceite, algunas con nombre propio como las conocidas como tortas Inés Rosales, elaboradas con aceite de oliva virgen extra y que se fabrican desde hace más de un siglo, tradicionales y exportadas a numerosos países. Las tortas de aceite sevillanas son dulces, crujientes y hojaldradas, recubiertas de azúcar y sésamo. En otras provincias andaluzas como Córdoba o Jaén se conocen como tortas dormías y en Granada las llaman salaillas.

También elaboran tortas similares en Portugal, Grecia, Italia, Turquía, Marruecos y otros países mediterráneos. La masa siempre es similar: harina, a veces huevos, aceite de oliva virgen extra, alguna hierba o licor, canela, sésamo, sal y azúcar.

Podemos animarnos a preparar alguna receta tradicional que encontraremos fácilmente en la red o ponernos creativos preparando nuestras propias tortas de aceite al gusto personal. Es temporada de aceite, aprovechad y animaros a preparar una repostería sana, sin conservantes ni colorantes que hará las delicias de toda la familia y recordemos que la dieta mediterránea ha sido reconocida por la Unesco como patrimonio cultural inmaterial de la humanidad y nuestras tortas de aceite pueden ser incluídas sin duda en esta saludable dieta.